Origen del atletismo: Quién creó su historia
El origen del atletismo se basa en tres movimientos que por naturaleza hacemos los seres humanos: correr, saltar y lanzar. Al contrario de otros deportes, el atletismo no lo inventó ni una persona ni en un lugar determinado, sino que se fue desarrollando como una práctica cultural y social en diferentes civilizaciones en paralelo. Con el tiempo, esta práctica encontró en los Juegos Olímpicos de la Antigua Grecia su punto de partida como deporte reglado, marcando el inicio de una historia que aún sigue evolucionando.
En este artículo descubrirás el origen del atletismo y qué culturas fueron claves en su desarrollo Además te contaremos cómo se configuró su historia moderna y también cómo surgió la participación femenina en esta disciplina. Y si eres un verdadero amante del deporte, te invitamos a consultar eventos deportivos en directo para vivir la pasión en tiempo real.
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Origen del atletismo
El origen del atletismo se remonta a la prehistoria, Sin embargo, la primera competición oficial de la que se tienen constancia data del año 776 a.C. Se trata de los Juegos de Olimpia, organizados en honor a Zeus, el dios supremo del Olimpo.
Antes de que la competición adoptara unas formas regladas, el origen del atletismo se pierde en el tiempo. Algunas pinturas rupestres del paleolítico inferior y del neolítico, fechadas entre el 6000 y el 5500 a.C., ya muestran escenas de rivalidad entre corredores y lanzadores. Más tarde, en Egipto, ya en el siglo XV a.C., se encuentra la referencia escrita más antigua de una carrera a pie. Esta fue hallada en la tumba del faraón Amenhotep II (1438-1412 a.C.). Por eso se considera el atletismo el deporte organizado más antiguo de la historia.
Aunque fueron los griegos quienes dieron más gloriosas repuestas al atletismo, ya la habían venerado civilizaciones como la egipcia y la mesopotámica miles de años antes de que los Juegos griegos vieran la luz. Se cree que los egipcios fueron los primeros a contribuir al origen del atletismo ya en la duodécima dinastía, con carreras a pie incluidas. Aunque los datos que tenemos son pocos e imprecisos. Lo que sí se sabe con certeza es que en el 3000 a.C. ya había competiciones reservadas a las clases dominantes. Además, el ejercicio físico se consideraba un elemento fundamental en la educación del faraón y de su corte.
Origen del atletismo en la Antigua Grecia
Mientras tanto, en Europa, los irlandeses del periodo precéltico, los griegos de Acadia y los cretenses de la civilización minoica, fueron los pioneros en aportar su granito de arena al origen del atletismo como deporte competitivo hacia el 2000 a.C., Edad del Bronce. Por su parte, las competiciones griegas están mucho mejor documentadas. En libros como La Ilíada y La Odisea, obras atribuídas a Homero, se narran hazañas atléticas que se realizaban en honor a los dioses o a los héroes. La fuerza, la agilidad y la victoria se consideraban dones divinos, y el respeto a las reglas suponía cumplir la voluntad de dioses como Zeus, Hermes o Apolo.
En el año 776 a.C. se inscribió por primera vez el nombre de un campeón, Coroebo de Élide, vencedor de la carrera de estadio. Ese día comenzó la cuenta del calendario olímpico, que medía el tiempo en periodos de cuatro años llamados olímpiadas. Desde entonces las pruebas respondían a una misma estructura básica que aún hoy se mantiene: carreras, saltos y lanzamientos. Cada cuatro años en Olimpia, en honor a Zeus, se celebraban los Juegos y miles de espectadores contemplaban las competiciones.
Los orígenes de los Juegos se pierden en la mitología. Según una versión los instauró Hércules, para dar las gracias a Zeus tras completar uno de sus trabajos. Según otra, la creación de los Juegos fue en honor a Pelope, un héroe al que se rendía culto en el Peloponeso. Sea como fuera, las Olimpiadas se convirtieron en la manifestación atlética más importante del mundo antiguo y sentaron las bases del atletismo moderno.
Quién creó el atletismo
Es complicado señalar con exactitud quién creó el atletismo, ya que el origen del atletismo surge de necesidades básicas del ser humano: correr, saltar y lanzar. Sin embargo, entre las primeras culturas que lo practicaron con más orden y método están los egipcios. Ya en el Imperio Medio se contemplaba la carrera como una de las actividades de la vida cotidiana. Se ha llegado a documentar incluso faraones y miembros de la corte haciendo pruebas de resistencia, llegando a correr distancias de hasta 100 kilómetros de Menfis a El Fayún, ida y vuelta, y con paradas cada poco a descansar, que podían llegar a durar cerca de ocho horas. Estas prácticas demuestran lo importante que era el atletismo en la educación y la preparación física de las élites egipcias.
Los juegos irlandeses: Lugnas Games o Tailtean Games
Pero no fueron los egipcios los únicos que desarrollaron competiciones atléticas. En Irlandaden, en periodo precelta, ya se celebraban los Lugnas Games, que posteriormente serían conocidos como los Tailtean Games. Dice un manuscrito que se conserva en el Trinity College de Dublín, titulado Book of Leins (1160), que estos juegos llevaban ya diecinueve siglos de existencia. En ellos se hacían pruebas de lanzamientos y saltos, propias de los celtas. En el lanzamiento lo más característico era el de ejes de carros, que se considera antecesor del lanzamiento de martillo actual. También practicaban el salto de altura, aunque este no fue muy bien recibido por los griegos. Según ellos, era muy poco pulido para lo que ellos acostumbraban. Estos juegos irlandeses, según algunas fuentes, se mantuvieron hasta el siglo VI d. C.
Mitología griega en la historia del atletismo
Pero por otro lado, los griegos fueron fundamentales en la consolidación del atletismo como un deporte de competición. No solo entrenaban para la guerra, sino que también tenían un carácter religioso, corrían por honor a las divinidades y a los héroes. En la mitología griega, la fuerza, la rapidez y la victoria eran dones que los dioses otorgaban. Los atletas cumplían las normas como si ejecutaran la voluntad de Hermes, de Apolo o de Zeus. Y para los griegos, la gloria no era algo que correspondiera solo al atleta, sino que también valoraba a su familia, su polis.
Historia moderna del atletismo
Después del fin de los Juegos Olímpicos antiguos, el atletismo quedó muy relegado durante siglos. No sería hasta finales del siglo XIX cuando se asentaran los fundamentos del origen del atletismo moderno, con una estructura mucho más organizada y con unas normas ya reglamentadas por la clara influencia anglosajona.
No era igual que en la sociedad griega: los pueblos nórdicos como celtas o vikingos sí que hacían actividades físicas, pero no tenían competiciones regulares ni calendarios fijos. Fueron los ingleses los que se pusieron en el papel de auténticos pioneros, dándole forma a un deporte con reglas claras y encuentros oficiales.
El primer gran hito del que hay constancia fue en 1838, cuando en Hoboken (Nueva Jersey) se celebró la primera reunión atlética de la historia. Poco después, en 1863 se dio la primera competición en pista cubierta, en Londres en el Ashburnham Hall y en 1864 tuvo lugar el históricomatch entre las universidades de Oxford y Cambridge. En 1866 Inglaterra celebró el primer Campeonato Nacional del que hay noticia y en 1876 se dio lugar al primer campeonato estadounidense.
Internacionalización del atletismo
La internacionalización llegó en 1895, con el encuentro completo entre el New York Athletic Club y el London Athletic Club. Apenas un año después, en 1896, se inauguraron en Atenas los primeros Juegos Olímpicos de la Era Moderna, impulsados por el barón Pierre de Coubertin. En estos Juegos ya se utilizaron las distancias métricas en vez de las yardas, aunque sí que éstas últimas son la raíz de las pruebas actuales. Los 100 metros vienen de las 100 yardas (91,44 m), los 200 metros de las 220 yardas (201,17 m) y los 400 metros de las 440 yardas (402,34 m).
Durante todo el siglo XX el atletismo siguió creciendo y consolidándose. En 1912 se creó la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF). A la par, comenzaron a publicarse registros mundiales de atletismo y se sumaron grandes hitos como la incorporación del atletismo femenino en los Juegos Olímpicos.
Origen del atletismo femenino
El origen del atletismo femenino se sitúa en los años veinte. En 1924 se creó la Federación Internacional de Atletismo Femenino (FSFI), que quería dar más espacio a las mujeres en este deporte. Ese mismo año, en el Congreso de París, la IAAF apoyó la petición de la FSFI de incluir pruebas femeninas en los Juegos Olímpicos. Gracias a ello, en Ámsterdam 1928 las mujeres compitieron por primera vez en cinco pruebas: 100 metros, 800 metros, relevo 4×100, salto de altura y lanzamiento de disco.
La participación femenina ha ido creciendo desde entonces, y con un nivel cada vez más competitivo. El primer Campeonato del Mundo se celebró en 1983. A lo largo del tiempo se han ido sumando nuevas disciplinas. En 1994, los 5.000 sustituían a los 3.000 en los Campeonatos del Mundo. En 1999, la pértiga y el lanzamiento de martillo se añadían al programa oficial. Además, el maratón se ha convertido en una prueba muy atractiva para las mujeres. De hecho, les vemos muy competitivas, debido a su gran capacidad de resistencia en comparación con los hombres.
IAAF y el origen del atletismo femenino
El apoyo institucional también ha sido fundamental. La IAAF ha desarrollado programas específicos con cursos, simposios y centros regionales para fomentar el atletismo femenino. Y, por ejemplo, un hecho histórico se produjo en 1995, cuando Nawal El Moutawakei (Marruecos) y Abby Hoffman (Canadá) entraron a formar parte de las dos primeras mujeres en el Consejo de la IAAF, y que volvieron a ser nombradas en 1999.
Y, para redondear todo este proceso, la IAAF quiso reconocer el mérito a estas deportistas. En 1998 se proclamó el Año Internacional del Atletismo para Mujeres, para celebrar la presencia femenina en esta competición. Este hito también promocionóel deporte femenino en todo el mundo y fomentó la presencia de mujeres en el atletismo en todas sus facetas, como entrenadoras, árbitros o técnicas.
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